Queda comprobado en esta campaña que la bajeza no tiene límites, junto a una colaboradora fuimos víctima o de un caso de inseguridad o de un nuevo intento de amedrentarnos, sin embargo algunos inescrupulosos intentan desinformar, y poner como victimarios a quienes somos las victimas, y en este sentido mienten al decir  que los materiales y el dinero que nos robaron era para “repartir” en un barrio.

Quiero dejar claro ante esto la única verdad y dejar en evidencia la calaña de quienes han salido a correr y publicar  estos rumores.

En primer lugar toda la ciudadanía sabe que no es propia de nuestra historia y prácticas en Cambiemos subestimar a los ciudadanía intentando comprar voluntades con dinero, ese tipo de prácticas son propias de los viejos apretadores de la política Pampeana.

En segundo lugar quiero revindicar a los vecinos del barrio Mataderos y transmitirles la vergüenza ajena que me ocasiona tener que leer en medios cómo son subestimados intentando establecer que pueden “vender” su voto por dadivas.

Tercero el ataque a mi auto, y posterior robo de las pertenencias de mi colaboradora, Noelia Viara, no deben quedar impunes como  miles de hechos de inseguridad al mes en esta provincia, así como también debe quedar claro que el dinero que portaba Noelia era para el pago de la Facultad, tal como consta en la denuncia que adjuntamos, Noelia es una de las miles de Pampeanas que deben dejar la provincia para poder acceder a una carrera universitaria y deberíamos cuidar a aquellos jóvenes que hacen el esfuerzo de estudiar y trabajar para progresar en la vida y no hacerlos blancos de operaciones políticas.

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