El funcionario municipal humilló a la empleada Cristina Erazun. El SOEM reclama que se vaya y acusa al secretario Mario Cortina de «protegerlo». El área de Espacios Verdes, convulsionada por la situación. «Se llenan la boca hablando de violencia de género y ahora tapan todo», reprochó el SOEM.
Los trabajadores del área de Espacios Verdes quedaron en el medio de un nuevo conflicto con la Municipalidad: acusan al subdirector de Espacios Verdes Marcelo Fonzo de haber maltratado hasta la humillación a una empleada y piden su renuncia.
Cristina Erazun, 58 años, 8 años trabajando en ESpacios Verdes, fue la víctima del último maltrato. El hecho puntual se produjo este jueves. La mujer se desempeña en el área de Orientación al Público. Acusa a Fonzo de que la insultó y le rayó una planilla.
Pero ese tipo de maltratos, según dijeron los empleados, se habitual. «Esto viene desde hace rato. Desde que asumió, empezó a mandarme a los gritos, siempre tratándome de mala manera verbal, señalándome con el dedo», dijo la trabajadora.
Consideró que «se pasó un límite. Me humilló delante de todos. Venía desde el lunes con una seguidilla, yo no quería hacer esto, pero este señor no entiende por las buenas e hice lo que tenía que hacer».
El secretario gremial del Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM), Víctor Schmidt, dijo que «ya pasamos todos los límites con este señor». Pidió la renuncia.
«Lo que hace es una aberración, además con una empleada extaordinaria, que no tiene problemas con nadie. Le hizo un maltrato inaceptable. No se puede creer», aseveró.
«El estado de la mujer es lastimoso, la hizo descomponer y este señor como si nada. Ahora viene Cortina, que lo sale a tapar, no queremos que esto quede impune, quieren hacer responsable al personal», repitió el gremialista.
Se lo acusa formalmente de maltrato laboral, «desde el día que entró. Esto es la gota que colmó el vaso. Esto no lo podemos dejar pasar: el intendente tiene que tomar una medida», advirtió.
El sindicalista remarcó que «acá está la prueba de cómo tratan al personal, no lo quieren entender; esto es un desastre, no se puede dejar pasar. Este señor tendría que salir del despacho, abandonar el municipio. Pero lo vienen a proteger. Después hablan de violencia de género, se llenan la boca hablando de esos derechos y ahora lo protejen: por favor, Altolaguirre, que se vaya, no puede estar ni un minuto más. Él tiene esa forma de ser, provoca a la gente. Pero viene Cortina y se tapan y se cubren. Es muy grave, gravísimo, no una cosa así nomás».