Sara Garfunkel y Sandra Nisman, madre y hermana del fallecido fiscal, reclamaron en una entrevista con la Agencia Judía de Noticias que «no se cierre la causa ni que siga eternamente la carátula como muerte dudosa». Dijo claramente » lo mataron, no se mato »
A días de cumplirse el primer aniversario de la dudosa muerte del entonces titular de la Unidad Fiscal de Investigación del Atentado a la AMIA, Alberto Nisman, Sara Garfunkel y Sandra Nisman, madre y hermana del fiscal, mantuvieron una extensa charla con la Agencia Judía de Noticias en la que revelaron detalles de la historia de la familia y de la personalidad del fallecido fiscal, agradecieron el apoyo recibido el último año, rechazaron la campaña de desprestigio montada contra quien no puede defenderse y reclamaron el total esclarecimiento de su muerte.
Madre e hija coincidieron en que «no les cierra» la hipótesis del suicidio, fundamentalmente por su estado de ánimo previo y por la posición final del arma, pero mientras Garfunkel fue tajante -«No se mató, quisiera saber qué pasó y cómo fue todo el armado», afirmó, Nisman reclamó que «no se cierre (la causa) ni que siga eternamente la carátula como ‘muerte dudosa’, sino saber algún día cómo murió: si lo decidió él, si lo obligaron».