Con 161 votos a favor, ocho abstenciones y ningún voto en contra, la Asamblea General de Naciones Unidas adoptó el jueves 28 de julio una resolución que considera que el acceso a un medio ambiente limpio, sano y sostenible es un Derecho Humano Universal, una definición que cambiará la naturaleza misma del derecho internacional de los Derechos Humanos.
