Con un dólar que aún corre atrás de los precios y en medio del debate por el alza de tarifas, la inflación fue en abril de 6%, lo que implicó una desaceleración frente a marzo -el peor dato en 20 años-, pero en un nivel aún muy elevado. Por caso, estuvo casi dos puntos por encima del mismo mes del año pasado. El dato anual es el más alto en los últimos 30 años.
El IPC que calcula el Indec acumuló en el primer cuatrimestre del año un avance de 23,1%, mientras que en doce meses llegó a 58%. Se trata del peor dato desde enero de 1992 superando así el 57,3% de mayo de 2019. La inflación núcleo -que elimina precios regulados y estacionales- aumentó 6,7%, más de dos puntos por encima del año pasado y arriba del mes pasado. Los alimentos subieron 5,9%, por lo que desaceleraron frente al 7,2% que mostraban en marzo.