La Unión de Trabajadores de la Educación de La Pampa (Utelpa) no lo esperaba. Hoy se vio sorprendida por el anuncio de que el 14 de septiembre volverán las clases presenciales en la provincia. Por eso, por lo pronto, demandó que en forma urgente se termine con el protocolo sanitario para evitar contagios de coronavirus dentro de las aulas.
«Desde nuestra organización y ante el trabajo que tenemos por delante con las escuelas, exigimos aprobar y garantizar el protocolo de regreso a las aulas, para dar tranquilidad a nuetrxs compañerxs y a la sociedad en general», dijeron en un comunicado. «Vamos a garantizar que todas las escuelas de nuestra provincia vuelvan a la presencialidad, solo sí están dadas las condiciones de Seguridad e Higiene».
Los dirigentes del mayor gremio pampeano fueron citados a una reunión. Les dijeron que era informativa, pero inmediatamente se enteraron de que se había establecido el cronograma de regreso a clase entre el gobernador Sergio Ziliotto y el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta.
Según les informó el Gobierno, la implementación en toda La Pampa será gradual y estará vinculada a la evolución epidemiológica de la provincia.
Los sindicatos y el Gobierno venían trabajando con un protocolo, en el marco de la Comisión de Salud. El anuncio trastocó un poco los tiempos: ahora deben apretar el acelerador para cumplir con los plazos establecidos hoy: el lunes 24 regresan ya los directivos y el lunes 31 todos los docentes a las escuelas.
Ese protocolo, entre otros puntos, debe establecer las medidas de distanciamiento, el funcionamiento de los baños, cómo serán los recreos y las formas de limpieza y desinfección de las escuelas.
Según dijo el Gobierno, el objetivo de esa reincorporación presencial es avanzar con todos los equipos docentes en la organización pedagógica de cada institución y la reorganización de la enseñanza en tiempos de pandemia, además de tomar contacto con los protocolos necesarios para el cuidado de la salud de la comunidad educativa, se informó oficialmente.